domingo, 12 de febrero de 2017

De carrera solidaria.


¿Más de un mes sin escribir? Cuando he visto la fecha de mi última entrada me he sorprendido, primero por lo rápido que pasa el tiempo y segundo porque para mi escribir es una especie de "terapia" y ver que llevo tantos días sin hacerlo no es buena señal.
La verdad es que este mes he estado un poco pachucha y eso ha hecho que haya dejado a un lado casi todo lo que no tengo que hacer "obligatoriamente" cada día, sólo con llevar la casa adelante me sobraba.
Hoy he vuelto a sacar la cámara de fotos del armario para inmortalizar algo muy importante para el enano. Josemi hoy ha corrido la milla solidaria urbana que organiza la asociación "la huertecica" de Cartagena y era tal su emoción que he querido tomar unas fotos para que pueda recordarlo siempre. 
Todo empezó cuando su seño de educación física le dijo hace una semana que era de los que más corría de clase, y que si quería podía participar. A partir de ahí no paró de perseguirme hasta que escuchó un "sí" por mi parte y me vio delante del pc inscribiéndolo. Para él era algo muy importante, poder participar y así "colaborar". Por más que yo le explicaba que aunque en el mapa parecía un trocito muy pequeño, en la realidad correr esa distancia cuando no estas acostumbrado no es tan fácil él insistía e insistía. Su ilusión no disminuía de ninguna manera, y anoche se acostó temprano para descansar y hoy tener su "gran día". 
Ni que decir tiene que esta mañana no me ha costado nada que se levantase y se vistiese. Con toda nuestra ilusión hemos ido media familia a apoyar al enano (la otra media estaba enferma o había trasnochado) pero el tiempo ha decidido no acompañar al montón de niños y no tan niños que esta mañana participaban con más o menos expectativas en las distintas modalidades, así que, aunque habían mogollón de actividades en el parque donde estaba situada la salida para pasar un buen rato después, nosotros nos hemos vuelto cuando Josemi ha acabado su carrera, primero porque estaba exhausto y segundo porque chispeaba y no apetecía mucho quedarse. Obviamente os voy a enseñar unas cuantas fotos de mi pequeño campeón y de su carrera.



Aquí acabábamos de llegar y el Jefe le estaba colocando el dorsal.




Ya en la línea de salida, preparándose para empezar la carrera. En este momento corrían las niñas de su misma categoría.







En la línea de salida está justo delante del cartel amarillo de la izquierda, ha conseguido colocarse de los primeros para salir...







Ahora podéis llamarme madre babosa, pero decidme si no es verdad que estaba guapísimo y dándolo todo...claro que acababan de salir.






Y aquí a punto de llegar a la meta...creo que la imagen lo dice todo, el pobre estaba agotado y quedaba el último esprint, su cara era un poema. Pero ha terminado su carrera como un campeón, mi campeón.





Me despido y me prometo a mi misma no volver a tardar tanto en hacer "mis cosas" porque para la salud mental de una madre de superfamilia es necesario sacar tiempo para ella sí o sí, aunque sea después de haber sacrificado el no madrugar en domingo y haber acompañado a tu peque a que haga lo que tanto le apetecía. Todo sea por la familia, y por una buena causa como la de recaudar fondos para los más desfavorecidos.